La eficacia de la infiltración intraarticular de ácido hialurónico en el desplazamiento discal reducible de la ATM
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El desplazamiento discal reducible de la articulación temporomandibular (ATM) es uno de los trastornos articulares más frecuentes. Las características principales son el dolor articular en fases muy avanzadas (durante los episodios de bloqueos intermitentes), los chasquidos durante los movimientos de apertura, e incluso durante el cierre, de la boca y la desviación momentánea de la mandíbula durante la apertura, que se corrige tras reducir el disco desplazado.
El objetivo terapéutico del tratamiento definitivo es reducir el dolor intracapsular y no el de corregir la posición del disco articular dado que este logro difícilmente se mantiene con el tiempo. No obstante, siempre que no se pueda reducir completamente el grado de desplazamiento discocondilar se intentará, como mínimo, minorarlo. Esta posibilidad disminuye la probabilidad de que el cuadro avance hasta el punto de que el disco ya no se pueda reducir, situación que provocaría una limitación de los movimientos de la mandíbula de manera súbita (bloqueo articular).
Entre los tratamientos conservadores se encuentran la aplicación de técnicas de autorregulación física, la fisioterapia y la confección de las férulas de descarga. No obstante, las infiltraciones de ácido hialurónico (AH) (cirugía mínimamente invasiva) favorecen unos mejores resultados. La inyección “dilata” el espacio articular y puede facilitar la retracción del disco en algunos casos. Además, gracias a sus propiedades lubricantes, mejora la viscoelasticidad del líquido sinovial y disminuye la fricción entre las superficies articulares, impidiendo de este modo la formación de adhesiones que dificultan el movimiento discal durante la apertura bucal. Por otro lado, sus propiedades antiinflamatorias disminuyen la inflamación de los tejidos retrodiscales traumatizados por la presión del cóndilo, situación que también dificulta la recapturación discal debido al aumento del dolor articular.
